El Sigar, Badajoz.

Varios meses después de la última visita a este restaurante referente en la región, volvemos con ganas renovadas para comprobar las novedades en la propuesta de David Núñez, un cocinero y empresario que ha conseguido el meritorio objetivo de consolidar en el tiempo su proyecto, el cual goza de la confianza de una clientela habitual y puntual que copa la mayoría de días de la semana los diferentes espacios de los que consta este restaurante.
Somos conscientes de que ir a comer al Sigar siempre genera unas expectativas y cierta predisposición a la obtención de cierto resultado satisfactorio, entre otras cosas porque el nivel desde los inicios hace ya más de diez años se mantuvo alto. Siempre hubo puntos fuertes que hacían pensar que David había cogido un formidable camino que iba a llevarle a algo grande. Y quizás son esas altas expectativas las que nos generan la necesaria reflexión tras varias visitas en los últimos meses, sobre un posible estancamiento o conformismo visibilizado en su propuesta y ejecución.
Hasta hace bien poco, uno tenía la sensación de que el restaurante contaba con mucho más recorrido. Que una mejora en el servicio y la subida un peldaño más en cocina, podría llevar al restaurante a esa primera división con la que sueñan muchos/as cocineros/as. No obstante, la sensación de que el planteamiento en lo gastronómico ha perdido brillo es notorio.
A pesar de esta bajada que deseamos sea temporal, hablamos de unas de las mejores opciones de las que cuenta en la actualidad los pacenses para disfrutar de una cocina sin enredos fundamentalmente con productos de la tierra y foráneos.
De entre las diferentes posibilidades, el cliente puede elegir entre tres caminos compatibles entre ellos. Menú degustación, carta y tapas (servida también en mesa).
El renovado menú degustación (33€ IVA Incluido, bebidas aparte) consta de seis platos y difiere significativamente respecto a la anterior degustación en calidad e intención, encontrando más bajos que altos.
Comienza a modo de entrante con unas flojas láminas de foie y le un sigue un aceptable salmorejo con yema en una cantidad exagerada para un menú degustación.
Continúa con un pseudo risotto de setas y unas correctas vieiras con un mejor acompañamiento de pimientos asados. Termina su parte salada con un insulso lomo de cerdo en un pobre emplatado que lo desmerece aún más.
Finaliza con un agradable pre postre a base de una mini degustación de quesos: vaca, oveja y cabra que mejorarían con un corte más justo y un postre a modo de pastel de chocolate cuyo resultado nos parece justo.

En carta, sigue triunfando las láminas de hígado de oca marinadas, el carpaccio de gambas o los chipirones con arroz de sojas.
Entre los principales, interesante la corvina en adobo y el cochinillo ibérico asado con un buen punto y un más que mejorable acompañamiento de patatas y cebolla caramelizada que generan desconcierto.
Cambios también en los postres: tocino de cielo, tiramisú, crema de whisky al horno o este helado de plátano (maduro) con petazeta y bizcocho de frutos rojos.
Por otro lado, el menú de tapas puede resultar una de las mejores opciones que actualmente ofrece el restaurante. La lista de posibilidades es amplia: platos de cuchara, ensaladas, algo de pasta (entre la que se incluye la famosa lasaña de morcilla), varias carnes y pescados o incluso postres en formato breve a precios más que razonables (unos 4€ por tapa).
Cambios pues en este consolidado Sigar que a pesar de todo ha sabido aguantar el tirón en estos tiempos tan complejos para la hostelería.
El Sigar
Avenida Luis Movilla, 12, 06011 Badajoz.
Teléfono: 924 25 64 68
* Precio medio por persona aproximado en carta: 40€ (entrante, principal, postre y una bebida), precios en carta sin IVA (10%).
* Precio medio por persona aproximado con tapas: 15€.
http://www.elsigar.es/

