Desalar muy bien el bacalao y limpiar (espinas…) luego se pone a cocer junto a las patatas cortadas en trozos regulares.
Una vez cocido se machaca el bacalao y también la patata, debiendo quedar una pasta homogénea.
Luego empezaremos a juntar muy bien con la leche y el aceite, procurando emulsionar bien… nos quedará una mezcla esponjosa.
Poner en una bandeja de horno y añadir en la parte de encima la mantequilla y llevar al horno a gratinar hasta que quede muy bien gratinadito pero no quemado.
Consejos: para desalar el bacalao lo podemos hacer con leche, remojando el bacalao de un día para otro metido en el frigorífico.
Esta receta es un acompañamiento para un pan de pueblo calentito y recién hecho.
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